Hay una familia formada por el padre, la madre y tres hijos trabajadores. Todos los hijos dan su sueldo a los padres que administran el dinero. Una vez deducidos los gastos comunes se reparten el resto. La nueva distribución hace que los que reciben la mayor parte sean los padres a pesar de ser pensionistas. El hijo (A) que aporta más pierde una buena parte de su sueldo y se equipara con el hijo (C) que aporta menos pero que al final recibe mucho más de lo que aporta. El hijo (B) cuya renta es de la mitad del primero pasa a ser el hijo que recibe más que sus hermanos.
Pregunta:
¿Cuál de los hijos se irá de casa primero?
El A por perder poder adquisitivo y recibir como el que menos.
El B por pasar de bastante a mucho.
El C por pasar de poco a bastante
Respuesta:
Los padres no le dejaran por el principio de derechos adquiridos.
Los hermanos tampoco para no romper el principio de solidaridad.
Solución:
Para demostrar su vocación democrática, los padres quieren que se decida con una votación, de todos los miembros de la família.
Nueva pregunta:
¿Se escapará el hermano de casa?
¿O dejará que toda la familia le siga reprochando que no gane más y que debe aceptar la decisión de la mayoría?